Es un programa de intervención para familias socialmente vulnerables que tienen niños/as de 2 a 3 años de edad, expuestos a factores de riesgo para el desarrollo de problemas emocionales y de conducta. El objetivo es proporcionar a las familias la motivación para cambiar los comportamientos e identificar recursos aplicables.

Como parte de la intervención, se entrevista a los padres para identificar cómo las vulnerabilidades sociales pueden afectar negativamente el proceso de desarrollo de los hijos/as. Luego, se identifican estrategias que pueden implementar las familias para reducir los riesgos vinculados al desarrollo social y emocional de los niños, y se usan técnicas de entrevista motivacional para que los padres apliquen estas acciones.