Es un programa de meditación a través de la práctica del yoga para jóvenes mayores de 14 años con un alto riesgo de deserción escolar. El objetivo es mejorar las habilidades de manejo del estrés y de autorregulación emocional, fortalecer la adherencia a la escuela, y reducir el uso de sustancias psicoactivas.

El programa aborda los factores de riesgo emocionales, cognitivos y psicofisiológicos asociados al consumo de sustancias en adolescentes y jóvenes a través de técnicas básicas de yoga, como respiración, meditación y movimientos específicos. La intervención es implementada por un instructor experto y un asistente, en 20 sesiones que se realizan tres veces por semana durante siete semanas.